Fecha de estreno: 2009
Director: Alejandro Amenábar
Sinopsis:
Ágora es el quinto largometraje de Alejandro Amenábar. Se estrenó en cines el 9 de octubre de 2009. La película ganó hasta siete Premios Goya, lo que la convirtió en una de las más galardonadas de la historia del cine español. El guion se inspira en la novela “Hypatia, la mujer que amó la ciencia” de Pablo Gálvez.
La historia de esta cinta nos situá en la exuberante Alejandría del siglo IV d.c., en pleno periodo de expansión cristiana a lo largo de todo el Bajo Imperio Romano. Alejandría, ciudad creada y conservada por Alejandro Magno y su general Ptolomeo, unos 600 años atrás, alberga tesoros y una posición comercial privilegiada. Esto la convierte en un punto de interés estratégico vital para sus numerosos vecinos y rivales a lo largo de los siglos. Seléucidas, Nubios, Helenos y Romanos han peleado por conquistarla, pero su riqueza no se reduce al oro ni a las especias de Oriente, sino que se halla en el conocimiento que se instruye y recopila en su más famosa institución, la Biblioteca de Alejandría. Alejandría representa uno de los faros culturales, de desarrollo de las artes, recopilación de la historia y estudio de la ciencia y de las matemáticas, más importantes del la Edad Antigua, pero sufre un notable declive en el momento de producirse los acontecimientos que observaremos en la trama.
Hypatia, interpretada brillantemente por Rachel Weisz, es una reputada matemática y científica, enamorada de la astrología; estudio del cosmos y de los cuerpos celestes. En este periodo numerosos compañeros se dan de bruces contra la incapacidad de determinar el comportamiento de los astros, pero ella no desiste. Hypatia no encontrará unicamente obstáculos matemáticos a lo largo de su intento de explicar el universo que la rodea. Una importante revolución política sacude todo el Imperio, el Emperador Constantino legalizó el cristianismo a comienzos del mismo siglo y ahora sus acólitos extienden la palabra de Cristo por todo el Imperio. Esto llevará a Hypatia a encontrar problemas a la hora de proseguir con su investigación, considerada como brujería y paganismo por los miembros más fanáticos de las sectas cristiana. Esto por no mencionar el revolucionario hecho de que una mujer, de su época, sea respetada por sus conocimientos; incluso hasta el punto de atender, en calidad de profesora, a numerosos pupilos provenientes de todos los rincones del Mare nostrum.
En mi opinión, esta historia no podría estar más de actualidad y recomiendo mucho rescatarlo en vuestros televisores. No os van a faltar momentos para comparar los sucesos de la película con elementos de nuestra vida cotidiana. Persecución a la comunidad científica, cuestionamiento de la mujer, censura religiosa, negacionismo, convulsión en las calles, violencia. Sin duda, nos recuerda la inefable condición humana para tropezar varias veces con la misma piedra, pero también arroja un foco de luz en el que podríamos refugiarnos para llegar a buen puerto, la luz que despeja las dudas y los dogmas, la ciencia.
Por Xulián Tomás Fernández.
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